EL CAMELLO (Auto de los Reyes Magos)
El camello se pinchó
con un cardo del camino
y el mecánico Melchor
le dio vino.
Baltasar
fue a repostar
más allá del quinto pino...
e intranquilo el gran Melchor
consultaba su "Longinos".
-¡No llegamos,
no llegamos y el Santo Parto ha venido!
-son las doce y tres minutos
y tres Reyes se han perdido-
El camello cojeando
más medio muerto que vivo
va espeluchando su felpa
entre los troncos de olivos.
Acercándose a Gaspar
Melchor le dijo al oído:
-Vaya birria de camello
que en Oriente te han vendido.
A la entrada de Belén
al camello le dio hipo.
¡Ay que tristeza tan grande
en su belfo y en su tipo!
Se iba cayendo la mirra
a lo largo de camino,
Baltasar lleva los cofres,
-ya cantaban los pajarillos-
los tres Reyes se quedaron
boquiabiertos e indecisos,
oyendo hablar como a un Hombre
ni esos tesoros tan frios,
quiero el camello, le quiero.